Lucha en el IPN

18 Nov 2014   |   comentários

A impulsar consulta para decidir democráticamente el rumbo de la lucha
Rafael Mota, estudiante de la ESIME Zacatenco

Ante la movilización de masas y la profunda crisis de legitimidad por la que atraviesa el régimen político mexicano, el gobierno de EPN trata con urgencia de desactivar la lucha politécnica mediante mesas de diálogo entre la SEP y estudiantes. Este diálogo fue aceptado por un sector de la Asamblea General Politécnica (AGP) a espaldas de la comunidad estudiantil del IPN, sin consulta ni deliberación desde las bases.

Desde la juventud del MTS en el Poli, venimos planteando un plan de lucha democrático y combativo para ampliar el movimiento y conquistar nuestras demandas.
Para que la lucha no sea entregada ni acepte respuestas parciales o migajas, es necesario que el conjunto de la comunidad politécnica decida a través de una gran consulta realizada en las escuelas el levantamiento o no del paro y los pasos a seguir.
Partiendo de esta consulta, tenemos que jugarnos a fortalecer nuevamente las asambleas para democratizar la organización por escuela y la AGP, que debe ser el máximo órgano de decisión del movimiento estudiantil politécnico.

Hay que discutir el piso mínimo de negociación con las autoridades, que tendría que ser la solución de todo nuestro pliego petitorio, la realización del Congreso Nacional Politécnico (CNP), completamente independiente de las autoridades, compuesto por estudiantes, profesores y trabajadores administrativos representados proporcionalmente, que sea abierto, resolutivo y soberano, y el rechazo a la designación de un director interino hasta que concluya este Congreso y se elija la forma democrática de gobierno por toda la comunidad.

En el CNP tenemos que discutir además de la autonomía, la conformación de un gobierno tripartito para el IPN, compuesto proporcionalmente por los tres sectores que componemos la comunidad politécnica (trabajadores, académicos y estudiantes), para que seamos nosotros quienes resolvamos el rumbo a seguir para el Instituto y el carácter y objetivos de la educación impartida en las aulas, con el fin de poner el conocimiento y cultura politécnica al servicio de las necesidades de los trabajadores y sectores populares.

Al mismo tiempo, para estar en mejores condiciones y enfrentar de conjunto a este régimen podrido, es fundamental unificarnos con todos los sectores en lucha y sumarnos masivamente al movimiento nacional en solidaridad con Ayotzinapa.









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