Recorte presupuestal, tope salarial, despidos, inflación : Las debilidades en la economía las paga el pueblo trabajador

30 Mar 2015   |   comentários

Recorte presupuestal, tope salarial, despidos, inflación
Las debilidades en la economía las paga el pueblo trabajador
Diana Valdez
Las cosas no andan bien en la economía y no es necesario ser experto para notarlo. Todos los días nos damos cuenta cómo cada vez alcanza para menos: los alimentos son más caros, no se diga la gasolina o los servicios. Los salarios no suben y cada vez hay más despidos.
Desde hace algunos meses la situación económica del país se encuentra al filo de la crisis, la caída de los precios del petróleo y el fortalecimiento del dólar llevaron al gobierno a tomar medidas con el argumento de solventar la diferencia entre el dinero que entra y el dinero que sale.
Se anunció a principios de año como “medida sanadora” para la enferma economía el recorte al presupuesto, y se prometió que estas dificultades no se verían reflejadas en los bolsillos de los trabajadores. Mentiras. El recorte al presupuesto se hizo en el gasto social, salud, educación y el campo, dejando intacto el dinero destinado a la manutención del aparato estatal y de la costosa clase política.
Este recorte se traduce en topes salariales junto a la exigencia de mayor productividad. La cantidad de despidos ha aumentado y se esperan muchos más: sólo en PEMEX serán despedidos más de 100 mil trabajadores.
La inflación es otro tema que vuelve a tomar importancia en nuestros días. Con el fortalecimiento del dólar y los muchísimos productos importados que van desde maíz hasta gasolina, la vida se encarece. Mientras los grandes empresarios de los distintos países imperialistas “juguetean” en las bolsas y especulan con las tasas de interés para los mercados internacionales, las mayorías en el mundo mueren de hambre.
Suben los precios, se derrumba el nivel de vida
El huevo acumula una subida de 19.21% de agosto pasado a la fecha, llegando a un precio promedio nacional de 40 pesos, y en algunos estados del norte se vendió hasta en 70 pesos, ¡más de un salario mínimo!
México es el sexto país productor de huevo a nivel internacional. Los pequeños productores podrían satisfacer la demanda nacional sin problema, pero las decisiones del gobierno protegen los intereses de los grandes empresarios. Achacan este incremento a la supuesta gripe aviar en Estados Unidos y una vez más hacen que el precio lo paguen los más pobres.
El director de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA), Enrique Martínez y Martínez, anunció este lunes 16 que la subida se debe al alza de la demanda por el periodo de cuaresma, y que es un “aumento estacional”. Sin embargo, la subida generalizada del precio de los alimentos provenientes del campo responde a la existencia de un mercado agroalimentario ajustado a las necesidades de ganancia de los grandes “agrobusiness” como Monsanto.
Por una salida de los trabajadores
Quienes integramos el Movimiento de los Trabajadores Socialistas no creemos las mentiras de un gobierno que nos quiere hacer pensar que no sobreviviremos sin las cadenas del imperialismo norteamericanos, el cual nos mantiene a muchos en condiciones de pobreza para beneficio de pocos.
Opinamos que tanto para las decisiones políticas como para las que tienen que ver con la economía, el principal interés debe ser el bienestar de los trabajadores y sus familias, y que se debe atacar las ganancias y privilegios de los capitalistas y las transnacionales. Por eso proponemos luchar por una salida favorable a los trabajadores y decimos:
Aumento salarial de emergencia al nivel de la canasta básica y de acuerdo a la inflación real. Alto a los despidos. Plan de obras públicas bajo el control de las organizaciones obreras, y reparto de las horas de trabajo entre todas las manos disponibles, con igual salario.
Alto a los aumentos de los productos: que las grandes cadenas y tiendas de autoservicio que aumenten sus precios sean expropiadas y nacionalizadas bajo control de los trabajadores. A la vez, luchamos por expropiar a las grandes transnacionales, que controlan el mercado interno, fijan los precios y a la vez superexplotan a millones de trabajadores agrícolas.
Frente a la subida del dólar y la devaluación, luchamos por el control de la banca y el comercio exterior, bajo control de sus trabajadores.









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