MTS - Movimiento de los Trabajadores Socialistas

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  Documento sobre situacion economica y de los trabajadores en México

  
  

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Del “casi bajo control” al último terremoto en Dubai

Mientras alrededor del mundo las declaraciones sobre el fin de la peor crisis económica desde los años 30 eran cotidianas, como lo declaró el director del FMI Dominique Strauss-Kan “casi bajo control la crisis internacional”, el anuncio de incumplimiento de deuda el pasado 27 de Noviembre del 2009 por 59 mil millones de dólares en Dubai, plantó sobre la tierra todo este optimismo y generó fuertes bajas en las bolsas de valores a nivel mundial, pero sobre todo, recreó de nueva cuenta el fantasma de una recaída económica y bursátil, forjando bastantes dudas sobre si ya vimos lo peor de esta crisis. Aunque la señal de alarma encendida en Dubai por el momento se tranquilizó, este acontecimiento demuestra que el capitalismo aún no ha sanado y los temores de un nuevo colapso de estas características, como el que apenas se contuvo, pueda desarrollar en efecto domino el derrumbe de un mayor número de bancos, solo que ahora quebrarán los más grandes.
Se estima que con la crisis económica fueron 115 los bancos medianos que se declararon en quiebra tan solo en E.U. algo que sirvió para que los grandes amortiguaran sus perdidas y captaran de mejor manera los recursos que el Estado Norteamericano les brindo. Es cierto que en los meses de Septiembre y Octubre del 2009, la confianza en cuanto al repunte financiero que presentaron distintas instituciones como el JP Morgan motivó de vuelta a organizaciones financieras a reinvertir, activando moderadamente la demanda y la producción o en algunos casos logrando atenuar la caída del desempleo. Esto no ha sido suficiente como para pensar en un periodo de plena recuperación de la salud del capitalismo, si bien estos meses fueron puntos importantes para obtener un respiro después de la sacudida, el capitalismo no pudo mantener el paso y el mismo Barak Obama declaro en Noviembre que todavía estaba lejos la recuperación y que los temores persisten por una nueva recesión en W, sobre todo por que es incierto el que pasará cuando se retiren los estímulos económicos que se brindaron a nivel mundial a empresas y bancos, algo que represento tan solo 12 trillones de dólares y que hoy el Estado carece de la capacidad necesaria para mantenerlos por más tiempo. Esta incertidumbre mantiene a inversores, economistas, productores y al Estado mismo con una confianza mesurada, ya que están concientes que se podría generar una recaída en el sistema financiero mundial al retirar estos estímulos y comprobar que los bancos aun no son capaces de mantenerse por si solos. Dubai con todo y el gran escaparate de la inauguración de la torre más alta del mundo el pasado 04 de Enero, mostró la aun frágil estabilidad y la realidad de la economía mundial, la cual no ve aún tan cerca como quisiera la normalidad de la economía.

Tan solo en E.U. son 104 mil 665 millones de dólares el total de activos incobrables que arrojaron 95 bancos que quebraron durante el 2009 refugiando estos activos en los grandes bancos que no encuentran promesas de pago ante la delicada situación del desempleo en ese país. ¿Cómo van a cobrar esos activos? esta es una gran preocupación, sobre todo por que el principal punto de quiebre que mantiene a estos activos incobrables y a la economía misma en suspenso es el nivel de desempleo que registro en Octubre por 10.2 % índice no visto desde 1974, por ende al no haber ingresos en una gran franja de la población muchos créditos se vuelven irrealizables, no hay gasto de las familias que motive la producción y los reportes financieros que se presenten se vuelven agua al no poder resolver el problema de reactivar el consumo y motorizar de vuelta la producción. Este escenario que se vive en E.U. tiene una gran repercusión en el mundo si sumamos las altas expectativas de los países más dependientes como México, que lanzo las campanas al vuelo ante los anuncios de que la economía estadounidense crecería en un 3.5% esta ilusión se desmorono muy prematuramente al presentar el reporte del tercer trimestre del 2009 donde anunciaron que el PIB norteamericano había alcanzado solo el 2.8% A estos elementos de inestabilidad económica se suma la redoblada campaña militar que lleva a cabo Obama al mandar 30 mil soldados a Afganistán, presionando a sus aliados para que contribuyan con 10 mil efectivos más, o en America, la mayor injerencia militar llevada adelante en Colombia y Honduras. Estos elementos abren un escenario de mayor incertidumbre para la burguesía que se pregunta si se recuperaran los años dorados del capitalismo o si al menos encontraran en el próximo periodo un nuevo punto de equilibrio, sobre todo para países altamente dependientes de la evolución de la economía norteamericana como México.

Los estragos del torbellino mundial sobre México

La cara preocupada de Felipe Calderón cuando declaró ante los medios que la economía mexicana podría caer a finales del 2009 hasta un 8 % (algunos analistas aseguran que la caída del PIB será de 8.5%) revela bastante incertidumbre sobre el panorama económico, sobre todo por que solo son tres años de su gobierno y nada le asegura que los años por venir sean de mayor estabilidad. Por supuesto que nada tiene que celebrar el gobierno ante el derrumbe económico que sufrió el país con la crisis, pero mucho se contesta en cuanto que esta crisis es internacional, que el efecto era inevitable en México y que las acciones del gobierno fueron las adecuadas para suavizar la situación, como declaro Luís Robles presidente de la ABM (Asociación de Bancos de México) “se han perdido pocos empleos en comparación de los que se hubieran perdido si no se hubieran manejado bien las cosas” Tal ves el Sr. Robles se refiera a los mas de 2 millones 965 mil personas que se encuentran sin empleo, Joseph Stiglitz ya se encargo de poner en duda el manejo de la crisis por las autoridades mexicanas. Pero si bien en primer instancia el efecto de la crisis se resiente por que tuvo su epicentro en E.U. con lo cual remesas, exportaciones y precios del petróleo cayeron, la pendiente de la economía mexicana para nada es nueva, al contrario, desde el 2006 el índice del PIB ya venía presentando mayor contracción, esto como una consecuencia más del agotamiento del patrón de acumulación en México. El resultado al final de este agotamiento es evidente, México dejo de ser la perla más fulgurante del neoliberalismo y entro en una decadencia económica como ya se había evidenciado con la crisis del efecto tequila de 1995 y que hoy expresa de forma severa sus resultados.

Caída PIB por sectores desde 2006

Julio-Septiembre Octubre-Diciembre Enero- Junio

2006 2006 2007 2008 2009

TOTAL 5.2 4.0 3.0 2.7 -9.2

Agropecuario -0.1 12.0 2.1 2.9 1.3

Industrial 5.9 3.5 2.3 1.4 -10.7

Minería 2.6 -1.6 -6.0 -2.7 -0.3

Manufacturas 6.0 3.3 2.2 2.3 -15.1

Construcción 6.7 6.3 4.8 1.3 -8.2

Electricidad 14.1 16.1 3.4 5.9 -2.2

Servicios 5.6 4.3 3.6 3.4 -9.0

Comercio 6.5 2.8 3.9 5.4 -19.1

Inmobiliarios y de alquiler 4.3 4.5 2.7 3.4 -8.2

Financieros y de seguros 16.2 16.0 12.1 3.3 -6.1

Info. En medios masivos 11.7 9.7 10.2 9.7 2.5

Transporte, correos y de almacén 5.7 4.1 3.4 2.8 -12.0

Resto 3.3 2.9 1.7 1.3 -3.7

Fuente: Informes Sobre la Situación Económica, las Finanzas Públicas y la Deuda Pública Tercer trimestre 2009

Como vemos en esta tabla, la caída de los sectores que aportan al PIB no se dio solamente con el boom de la crisis económica en Septiembre del 2008 si no que venía presentando ya una desaceleración notable.
Por supuesto que la crisis motorizó esta dinámica y termino por instaurar de forma definitiva este declive, pero la dirección de la economía mexicana desde años atrás evidencia como en los sectores claves de la economía como la manufactura y el sector de la industria han existido desde el 2006 bajas notorias que arrastran a las clase obrera a la inestabilidad laboral y a las bajas salariales.
Desde el 2006 a la fecha se han creado más de 6 millones de nuevos pobres en México y la degradación del salario presenta un derrumbe de más del 60% desde 1998 a la fecha. No hay cifra ni tendencia positiva que valga para la clase obrera cuando es evidente que para el capitalismo la salida a la crisis no reposa necesariamente en dinamizar de vuelta la producción, si no que hoy con los estragos de esta crisis basa su hegemonía en los grandes rescates millonarios que le brindo el Estado, incrementos de la sobreexplotación durantes las jornadas laborales y en una reducción de costos que implican despidos masivos de trabajadores, todo esto para empequeñecer sus perdidas y golpear en primera instancia el nivel de vida de la clase obrera, como lo vemos en el sector manufacturero donde el salario por persona ocupada tuvo un incremento en el norte del país de 0.8 % mientras la inflación de las mercancías tuvo un incremento de 6.38 % en Septiembre. Habría que tener en cuenta que el personal ocupado en la manufactura tuvo un increíble retroceso debido a la caída de -16.4 % en la producción hasta Septiembre, propiciado por los miles de cierres de fabricantes de equipo de transporte, equipos de computo, maquinaria y equipo etc. tan solo de Noviembre de 2008 a finales del 2009 cerraron 4 mil 460 empresas concentradas en el norte del país que conformaban el sector de la maquila.

Industria 2007 2009

Bebidas 4,6 -0,4

Papel 3,2 -0,5

Alimentos 2,6 -0,8

Química 2,6 -3,2

Petróleo y carbón -0,6 -3,8

Minerales no metálicos 3,5 -9,9

Generación eléctrica 4,1 -11,4

Confección textil -0,3 -13,6

Prendas de vestir -3,5 -13,6

Plástico y hule 2,1 -14,0

Madera 3,3 -14,9

Insumos textiles -2,2 -15,5

Muebles -6,7 -15,7

Productos de cuero y piel -2,7 -16,9

Fabricación de metales 1,1 -18,3

Maquinaria y equipo -1,2 -23,8

Metálicas básicas -1,5 -25,5

Computación y comunicación 6,9 -26,4

Equipo de transporte 3,1 -41,7

Fuente: INEGI

¿Un 2010 de feliz recuperación?

Aunque no son pocas las empresas mexicanas que han presentado reportes alentadores sobre su actividad económica durante Septiembre y Octubre del año anterior, el panorama sigue siendo bastante negro para el 2010, sobre todo cuando ya se han mostrado los primeros latigazos a la economía popular con el aumentos a la gasolina, diesel y en consecuencia desatando una escalada brutal de aumentos a productos de la canasta básica que llega hasta el 100%.
Si a esto añadimos el enorme retroceso que ha presentado México en el terreno productivo, las consecuencias son notables particularmente para la clase obrera industrial, por ejemplo, la Inversión Extranjera Directa (IDE) tuvo un desplome 226 millones de dólares en el terreno productivo, esto muestra que hoy el miedo de invertir en México en proyectos de mediano y largo plazo que implican instalar o restaurar las plantas productivas están descartados, tan solo la inversión fija (productiva, maquinarias y plantas) sufrió una caída anual de 10.9%por lo tanto no habrá para el 2010 una recuperación del empleo como se anuncia. Esto debido a que la burguesía para nada va a arriesgar un solo centavo para recuperar los índices de producción de años anteriores en un país de tan alto riesgo como México, previniendo también una posible recaída de la economía mundial,. Más sin en cambio, no pueden tener su capital ocioso e invierten en carteras de deuda del gobierno federal como hace años no se veía, de Julio a Septiembre ingresaron al país más de 7 mil 783 millones de dólares de inversionistas extranjeros, la mayor cantidad en trece años, sobre todo por que estas inversiones les garantizan altos intereses y la facilidad de recuperar en determinado momento su inversión de forma inmediata. Un ejemplo se encuentra en la cancelación que anuncio Grupo Elektra de Salinas Pliego del proyecto para construir en Michoacán una armadora automotriz con la marca china FAW, pero a su vez expande su presencia en América Latina con Banco Azteca, lo que se puede traducir en que hoy sale más barato y menos riesgoso invertir en el terreno especulativo que en plantas de producción. Esto para nada puede generar gran alegría y tranquilidad para el gobierno, ya que se sobrecalientan estos instrumentos de deuda mientras la capacidad productiva sigue por los suelos y de desarrollarse un escenario mucho menos confiable para invertir en el terreno especulativo en México, los inversionistas extranjeros retiran sin pensarlo sus capitales invertidos y dejan al Estado en una situación de crisis aún mayor que la actual.

Ante esto es visible que no existirá una recomposición de la economía mexicana durante este año, ya que ninguna buena noticia que presuma el gobierno y la burguesía alienta la reactivación del empleo, los ingresos y el consumo, ni hablar del paquete de nuevos impuestos que se aprobó y que ya mostró en unos cuantos días de Enero su impacto. Al contrario, las buenas noticias que se anuncian en cuanto a la mejoría de la economía mexicana, siempre ocultan el origen de sus ganancias y avances, el caso de CEMEX que mientras hace gala de su calidad internacional, reporta un adeudo de impuestos por 38 mil 443 millones de pesos, más sin en cambio esta empresa se enorgullece de que en los meses de Septiembre-Octubre del 2009 sus activos se elevaron a 3.21 billones, cifra muy superior a la del año anterior, pero a la ves su planta laboral fue recortada con 12,143 despidos. Este no es el único ejemplo, las tiendas Soriana anunciaron que sus utilidades se elevaron a 1,154 millones de pesos, pero esta cifra solo fue posible mediante un recorte de gastos, lo que implico el despido de 13 mil 900 trabajadores. Apenas el 22 de Octubre empresas transnacionales como Bosch, Samsung, Bayer, Chrysler etc declararon que reducirían sus inversiones en México hasta en un 50 % lo que implica para este año nuevos recortes en sus plantas laborales.

Es claro que este año no será nada fácil para la gran mayoría de mexicanos. Por más esperanzas que el gobierno deposite sobre una hipotética recuperación de la economía de E.U algo que aún no se ve claramente, la crisis en México llego para quedarse por más de un año. Distintos analistas aseguran que el crecimiento del PIB para los próximos años será solo del 2-3% con tendencia a la baja. Es claro que el gobierno sabe esto, por lo cual la gran apuesta no es solamente económica si no que también es de carácter político y tendientes a bajar cada vez más el costo de la fuerza de la trabajo. Este año las tan mencionadas reformas que el empresariado pide a gritos, anuncian ya una dura batalla para el movimiento obrero de conjunto: ya vimos la primera declaración de guerra con el decreto de extinción de Luz y Fuerza y sabemos también que la medida en contra del SME abre la posibilidad para que este año se avance de conjunto en la búsqueda de nuevas medidas antiobreras La clave para el gobierno, la burguesía y sus partidos se encuentra entonces en generar las condiciones que le permitan establecer mejores escenarios económicos y sociales que reanimen a empresarios extranjeros y nacionales para invertir, ofreciendo un modelo más amplio de manufactura, con bajos salarios, mayor trabajo eventual y sin prestaciones, pero sobre todo con sindicatos aún más dóciles, buscando ofrecer las mejores opciones a nivel mundial para alentar al capital y condiciones más seguras para la inversión capitalista, ofreciendo altas ganancias e inmediatas, precios altos de las mercancías, nulos compromisos laborales e impuestos ficticios y servicios gratuitos. Para lograr imponer esto y generar las condiciones que le exigen los organismos internacionales, la apuesta del gobierno es brutal, ya que pretende mantener a una gran franja de la población en la desocupación por un largo tiempo, abarantando de forma absoluta la mano de obra e implementando un orden laboral aún más regresivo.

Ante eso, la clave para frenar este intento por imponer condiciones mayores de explotación es la entrada en escena del movimiento obrero organizado, en una respuesta concreta a la crisis económica y a sus nefastas consecuencias, como el intento de vaciar todo resquicio de tradición de lucha de las fábricas, empresas de servicios y sindicatos.

Solo el movimiento obrero, campesinos, estudiantes y desempleados armados con un programa de clase ante la crisis, pueden dar la pelea por defender la misma subsistencia de la población de conjunto, enfrentando este programa antiobrero, luchando por derrotar a la clase –la burguesía y sus agentes políticos- que históricamente descarga las crisis económicas que ella misma genera sobre las espaldas de millones de trabajadores y por un gobierno de los trabajadores y los explotados y oprimidos del campo y la ciudad.