MTS - Movimiento de los Trabajadores Socialistas

El gobierno mantiene la represión y criminalización de los
movimientos y los luchadores sociales, como lo demuestra, entre
otras cosas, su política en Atenco, ya que a un año de la brutal
represión, pactada entre los tres partidos hegemónicos y entre
los tres niveles de gobierno, siguen impunes los autores materiales
e intelectuales de los crímenes cometidos en el operativo del 3 y
4 de mayo, como el asesinato de Javier Cortes y de Alexis
Benhumea, los cateos y detenciones ilegales, las violaciones
contra la mayoría de las mujeres detenidas, etc.
Desde hace un año las autoridades penales del Edo. de México,
la SCJN, y la PGR mantienen a 31 de nuestros compañeros
injustamente encarcelados, alrededor de 150 personas aun
tenemos procesos penales, totalmente irregulares y amañados,
en libertad bajo caución; nos culpan de delitos que no se nos
pueden comprobar, de los cuales solo existe una sola «prueba»
en nuestra contra: las declaraciones de algunos policías que ni
siquiera pueden identificarnos cuando se les pide que nos señalen.

Ha quedado demostrada la parcialidad e ineptitud de jueces
que nos mantienen injustamente presos, como por ejemplo al
terminárseles el plazo para sentenciarnos no teniendo pruebas
suficientes para hacerlo, entre otras muchas irregularidades.
En el caso de las agresiones sexuales, la impunidad también
es una constante. Los autores materiales e intelectuales
continúan en libertad y las autoridades hacen caso omiso de las
denuncias interpuestas, alegando que no se cometieron
violaciones sino «excesos lamentables».

Esto es un ejemplo de la putrefacción y de la corrupción e
impunidad de las deslegitimadas instituciones del gobierno
mexicano; otro ejemplo de esto es la reciente violación y
asesinato de la señora Ernestina Ascencio a manos del ejercito.
Pero toda esta política de represión e impunidad no es exclusiva
del caso Atenco, es una constante del actual gobierno, como se
demostró en Oaxaca, donde quedan alrededor de 50 compañeros
presos, o en la represión que sufren desde Baja California hasta
Chiapas los compañeros de La Otra Campaña.
Hoy mas que nunca es necesaria la mas amplia unidad de todo el
conjunto de los explotados y oprimidos para tener fuerza para
frenar efectivamente la represión y que, me parece, se va a
desatar con mucha mas brutalidad.

A un año de la represión en Atenco ha quedado demostrado que
actuar de manera aislada (como lo llegaron a plantear algunos
compañeros de La Otra Campaña), es impotente para lograr la
libertad de nuestros presos políticos. Es necesario conjuntar y
coordinar todos los esfuerzos honestos y comprometidos (por
ejemplo en una Coordinadora Nacional contra la represión) con
la lucha por los presos para impulsar acciones contundentes que
nos puedan dotar de fuerza no solo para liberar a nuestros
compañeros sino para hacerles justicia, ya que mientras los presos
de Atenco ya llevamos un año injustamente presos y sometidos
a ilegales procesos penales, son los asesinos, los violadores y
los autores intelectuales quienes gozan de su libertad en total
impunidad.