MTS - Movimiento de los Trabajadores Socialistas

Avanza la militarización en Guerrero

Oscar Castillo

El gobierno federal, lejos de dar una solución a la demanda de los miles que se movilizan por la desaparición y asesinato de normalistas en el estado de Guerrero, sólo ha profundizado la estrategia seguida por el Estado desde el inicio de la “guerra contra el narco”, más militares y federales en las calles.

El miércoles 28 de enero se desplegaron 2000 antimotines federales alrededor de los edificios del Tribunal Electoral y de la PGR, en espera de manifestaciones en repudio a las ignominiosas declaraciones del procurador. Esto en el marco de que la presencia militar aumentó en los últimos 4 meses en los 22 municipios de Tierra Caliente y del Norte de Guerrero.

Los maestros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG) denunciaron el acoso constante en su contra en los distintos retenes establecidos en las carreteras. El 28 de enero 16 estudiantes de la Escuela Superior de Educación Física (ESEF) fueron detenidos violentamente en la Autopista del Sol y liberados gracias a la presión de los normalistas y pobladores.

La presencia de los militares y los federales provocó conflictos en diversas comunidades: el 6 de febrero los militares detuvieron a dos policías comunitarios en el municipio de Petaquillas, muy cerca de la ciudad de Chilpancingo, ante lo cual los pobladores bloquearon la carretera a la capital guerrerense, siendo reprimidos por el gobierno.

La violencia continúa

A pesar de los despliegues de militares y federales en esta entidad, el “crimen organizado” continúa operando y manteniendo un clima de violencia en el estado. El 6 de febrero fueron secuestrados 12 trabajadores de la empresa minera canadiense Media Luna, en el municipio de Cocula. Las autoridades calificaron el secuestro como un hecho aislado y la minera se desentendió de sus responsabilidades con los trabajadores, reconociendo sólo a uno de ellos como su empleado.

Los profesores de la CETEG han denunciado el clima de violencia generado por el narco y la impunidad con la que se manejan: los cárteles extorsionan a los maestros e impiden el paso entre comunidades, incluso no permiten el paso de los médicos en campañas de salud para atender a las comunidades más pobres. Profesores han renunciado a sus empleos en la zona de Tierra Caliente y en la Costa Grande debido a esta situación.

¿A quién protegen los federales?

Las fuerzas armadas son utilizadas en Guerrero para confrontar y evitar las manifestaciones en contra del gobierno, y amedrentar a los trabajadores y el pueblo pobre. Ante las elecciones el anuncio del gobierno local y federal es que arribarán más elementos para custodiar los comicios.

Al gobierno sólo le interesa la seguridad de los empresarios. Ante esto, es fundamental la solidaridad nacional con los trabajadores y los campesinos pobres de Guerrero, para enfrentar al gobierno y sus instituciones. A la vez, es fundamental que las organizaciones obreras y populares discutan democráticamente las medidas necesarias para enfrentar los ataques represivos y de los narcos, en el camino de la autodefensa obrera y popular.