MTS - Movimiento de los Trabajadores Socialistas

Consta de 22 puntos, que buscan atacar los intereses de los capitalistas a favor de los trabajadores y el pueblo pobre. Entre sus demandas, exige un salario mínimo igual al costo de la canasta familiar, que aumente periódicamente según el costo de vida; por el aumento de las jubilaciones; el reparto de las horas de trabajo con igual salario para terminar con la desocupación; la prohibición de los despidos y contra la tercerización.
A su vez, el FIT se manifiesta contra la represión y por la libertad de los presos políticos; denuncia los procesos judiciales contra más de 4,000 luchadores obreros y populares; exige cárcel perpetua para todos los genocidas de la dictadura, así como la salida de la Gendarmería y la policía de los barrios populares. También se pronuncia por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito; por los derechos de la mujer trabajadora y por vivienda digna para todos.

El Frente exige la expropiación definitiva de Cerámica Zanón (la expresión más avanzada entre las fábricas ocupadas por sus trabajadores luego de la crisis del 2001); por el no al pago de la deuda externa; por la reestatización de todas las empresas privatizadas, bajo control de trabajadores y usuarios; por la nacionalización,­ sin indemnización y bajo administración y control de trabajadores, de la banca, el comercio exterior y la gran industria; por la expropiación de la oligarquía terrateniente y la nacionalización de la tierra; contra la expulsión de los campesinos pobres y pueblos originarios de sus tierras; en defensa de la educación y salud públicas.

El FIT propone echar a la burocracia de los sindicatos y luchar por plena democracia sindical. Le exige a la CGT y la CTA que rompan su alianza con el gobierno y propone un plan de lucha de todo el movimiento obrero por aumento de salarios, contra el trabajo en negro y las tercerizaciones.

El FIT propone que los legisladores ganen lo mismo que un obrero, abolir el senado y la institución presidencial. Como conclusión de todas sus demandas, el FIT se manifiesta “por un gobierno de los trabajadores y el pueblo impuesto por la movilización de los explotados y oprimidos.”
El Frente también exige el retiro inmediato de las tropas argentinas de Haití, la salida de los ingleses de las islas Malvinas y el fin de la ocupación sionista de Palestina; se pronuncia contra el bloqueo y cualquier agresión imperialista contra Cuba y contra la restauración capitalista en la isla; apoya la rebelión obrera y popular en todo el mundo contra el imperialismo; busca la unidad socialista de América Latina y el socialismo internacional.

En lo inmediato, el FIT tiene el desafío de sortear las trabas impuestas por la reforma electoral, que tienen el objetivo de impedir que la izquierda y la vanguardia obrera se presenten como una alternativa política independiente y de clase frente a los partidos patronales. Con su programa y principios obreros, el FIT es un claro ejemplo de “parlamentarismo revolucionario”, frente a los privilegios de los políticos del régimen y contra el electoralismo oportunista de las organizaciones políticas y sindicales que, diciéndose “de izquierda”, van detrás de alguno de los partidos patronales.