MTS - Movimiento de los Trabajadores Socialistas

Los porros a diario amedrentan, «talonean», roban y golpean a estudiantes. También han actuado contra profesores y trabajadores y hoy amenazan con arremeter con más fuerza luego de su aparición del 12 de septiembre
En la UNAM, el IPN, los Colegios de Bachilleres y los CONALEPS actúan bajo la colusión y auspicio de autoridades educativas y partidos como el PRI, el PAN y en los últimos tiempos también de las autoridades delegacionales donde gobierna el PRD.
Reciben impunidad y su actividad tiene tras de si un historial de estudiantes asesinados por arma de fuego, heridas de arma blanca y violaciones a compañeras estudiantes. Son parte de una cadena de corrupción, mafias y grupos de poder en las altas cúpulas de las instituciones de educación media y superior. Actúan bajo la fachada de la «promoción deportiva(porras) y cultural». Asambleas y grupos estudiantiles como los del CCH-Vallejo han documentado estos actos mediante videos, fotografías y la obtención de nominas secretas. Son los porros, grupos de choque que hostilizando a todo la comunidad son dirigidos principalmente contra los activistas estudiantiles y todo intento de organización estudiantil independiente.
Luego de los ataques del viernes 12, el rector Narro responde que expulsara a dirigentes de estos grupos que encabezaron la agresión. Sin embargo la respuesta de la rectoría iguala a los porros con las organizaciones y colectivos estudiantiles que en las últimas semanas recibieron solidariamente a campesinos y profesores de Morelos en lucha por la defensa de sus derechos y contra las imposiciones del gobierno de Calderón. Las autoridades podrían acabar con estos grupos de un plumazo, no lo hacen porque hoy sus actos les permiten justificar una nueva ofensiva represiva. Es decir, preventivamente evitar que la universidad «se contagie» por la inestabilidad nacional. Para esto, ya se escuchan voces que señalan que la UNAM debe estar resguardada con policías o cuerpos de seguridad más preparados, es decir, mayor represión aunque de forma velada.

SÓLO ORGANIZADOS DESDE ABAJO GARANTIZAREMOS NUESTRA SEGURIDAD

Para evitar lamentar las desgracias y estar verdaderamente seguros ante estos ataques, la mejor manera que tenemos los estudiantes es preparar la autodefensa desde la realización de asambleas amplias que se pueden fortalecer si de las mismas participan trabajadores y estudiantes. Junto a esto es importante lanzar una gran campaña de información y denuncia hacia toda la base de estudiantes, trabajadores y académicos; también hacia fuera de la universidad donde la participación de los padres de familia es muy importante, lo mismo que hacer un gran llamado a las organizaciones sociales, de derechos humanos y los sindicatos para que se pronuncien repudiando esta represión.
La marcha del 2 de octubre en el 40 aniversario de los 68 que alimentaron los sueños de una generación por un mundo sin opresión, represión y explotación debe servir para que en escuelas como la UNAM comience a reorganizarse un nuevo movimiento estudiantil combativo y de pie junto a las nuevas luchas del pueblo trabajador.

Desde la LTS-ContraCorriente fuimos parte de las asambleas y reuniones de organización contra estos ataques porriles, donde planteamos que para estar preparados se debe discutir democráticamente como debemos responder y lograr la disolución de estos grupos; es importante que se pongan en pie coordinadoras estudiantiles por escuela y una gran coordinadora general estudiantil.