Atenco
La justicia de los ricos, la injusticia para los pobres
01 Jun 2007
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Por: Rosario Perez
La sentencia a 67 años y seis meses de prisión para Ignacio del Valle, Héctor Galindo y Felipe Álvarez; por el juez primero penal de Toluca, José Blas Hernández; es nuevamente una violación a los derechos elementales, después de que todas las violaciones procesales: falsificación de datos y delitos, sin testigos, la tortura, las violaciones y abusos sexuales a hombres y mujeres, fueron evidentes. Esta resolución judicial es resultado de una reforma penal en el Edomex, donde se equipara el delito de secuestro « a quien detenga en calidad e rehén a una persona para obligar a la autoridad a realizar o dejar de realizar un acto de cualquier naturaleza…». Esta reforma fue aprobada meses después de que los compañeros e Atenco utilizaran esta medida como factor de intercambio para liberar a sus compañeros rehenes del Estado, durante el movimiento en defensa de sus tierras comunales.
Esto es una prueba más de la antidemocracia del régimen y sus instituciones, que no dejan ni un espacio entro de su legalidad para la defensa de los presos políticos que existen en el país. Siguen la línea de mano dura para todos aquellos que decidamos enfrentar sus planes de hambre y miseria. Mientras que a los grandes narcotraficantes les dan una pena privativa de libertad por 17 años, a los luchadores sociales les dan 67. No se puede ocultar la derechización de este gobierno al aplicar «todo el rigor su la ley» y su «estado de derecho» contra los que han defendido férreamente sus derechos. Y ha demostrado una y otra vez el carácter reaccionario e instituciones como el poder judicial y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos. emos visto que la Suprema Corte no encarcela a los genocidas del 68 y 71, que deja a los que roban al país disfrutando de libertad, y avala las leyes contra los trabajadores y el pueblo pobre. La CNDH ya no puede negar su papel de «tapadera» al gobierno federal, ya ue en relación a las violaciones de los derechos, ha emitido r e c o m e n d a c i o n e s solamente en el sentido que de «pudiera ser violación a los derechos humanos», cuando hemos sido testigos de cientos de violaciones a éstos y que en los últimos años ha sido evidente. A un año de la brutal represión en San Salvador Atenco, siguen detenidos y sujetos a proceso 27 compañeros. Uno de ellos nuestro compañero Néstor Soto García, al que no se le ha comprobado un solo delito de los que se le imputan, al igual que a los emás compañeros detenidos.
Por eso exigimos la libertad inmediata e incondicional para nuestro compañero y los demás compañeros de San Salvador Atenco, ya que su único «delito» ha ido ser defensores de sus erechos, luchadores sociales. Hoy debemos ser serios en los planteamientos de defensa contra la represión, pero sobre todo, cerrar filas por nuestras libertades democráticas y la liberación de los presos políticos que llenan las cárceles de este aís. Es fundamental un llamado a la unidad de todos los sectores democráticos y de izquierda para m o v i l i z a r n o s conjuntamente, ya que esta unidad en la acción es la única vía que tenemos para defendernos y enfrentar la represión del gobierno yunkista y de as instituciones que lo secunden.
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