MTS - Movimiento de los Trabajadores Socialistas

Las movilizaciones en solidaridad con los normalistas de la escuela normal rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, Guerrero, van en aumento a nivel nacional. Esta semana, más de 30 escuelas y facultades de diferentes universidades públicas realizaron asambleas, votando sumarse con paros de 48 horas a las acciones que a nivel nacional exigen la presentación con vida de los 43 normalistas víctimas de desaparición forzada hace ya casi un mes.

Este enorme fenómeno democrático retoma y profundiza el proceso de politización expresado en las marchas y asambleas masivas del 2012 y 2013 (#yosoy132 y acciones en contra de la represión al magisterio en lucha contra la reforma educativa), y surge con el llamado de la Coordinadora de padres y madres de los estudiantes normalistas desaparecidos a las jornadas de movilización los días 14-15 y 22-23 de octubre. Todos los días se realizan movilizaciones y nuevos sectores se suman con acciones de solidaridad en muchos estados del país.

En la capital, una treintena de sedes, escuelas y facultades de la UACM (San Lorenzo Tezonco, Cuautepec, Del Valle y Centro), UAM (Azcapo y Xochimilco), Chapingo, UPN (Ajusco) y UNAM (Prepas 2,3,4,5,6,8,9, CCH Azcapo, Sur, Naucalpan, Oriente, FCPyS, FFyL, Ciencias, Economía, Psicología, Arquitectura, Artes y Diseño, Acatlán, Aragón, Cuautitlán y Zaragoza), realizaron asambleas nutridas de varios centenares de personas cada una, algunas llegaron a superar el millar, votando sumarse a las acciones de solidaridad con brigadas permanentes a otras escuelas, metro y colonias cercanas, asistir a las movilizaciones convocadas por la Coordinadora de Familiares de los desaparecidos e impulsando los paros el 14-15 y 22-23.

Esta primer jornada de movilización fue nutrida por casi 40 escuelas en paro y dos concentraciones multitudinarias, un recibimiento en las Islas de CU con 6mil personas expresando la solidaridad con los familiares y compañeros de los desaparecidos, así como una concentración que por la tarde también congregó a millares en la sede de la PGR. También se sumaron al paro todas las escuelas normales urbanas y rurales del país tras concentrarse en la normal rural de Ayotzinapa y definir las próximas acciones, mientras las escuelas y unidades del Instituto Politécnico Nacional se mantienen en paro tras 3 semanas de lucha contra el intento de tecnificar los planes de estudio y aprobar un reglamento que criminaliza a los estudiantes que se organizan.

Desde la juventud del MTS, que ha participado activamente de las asambleas, paros y movilizaciones, pensamos que estos esfuerzos son una importante gimnasia de coordinación de lucha y respuesta unificada ante los ataques del gobierno, que buscan acallar las voces de quienes se oponen a sus reformas y luchas. Consideramos que es vital que la política de acciones unitarias se mantenga y profundice, generando un gran frente nacional de lucha contra la represión y en defensa de la educación pública. La movilización de la juventud organizada tiene que apuntar a unificarse con los trabajadores, en particular los de la educación que ya demostraron en el 2013 poder paralizar el país con la CNTE al frente. Esta perspectiva la hemos peleado en todas las asambleas donde participamos, apuntando la enorme necesidad de que el movimiento estudiantil, obrero y democrático avance no solo en la construcción de un plan de lucha unificado sino en impulsar una política independiente de los partidos del régimen y desconfiando de las buenas intenciones de las instituciones estatales.

Esta primera jornada de paros debe buscar fortalecerse y masificarse por medio del impulso de un Encuentro nacional en defensa de la educación pública y contra la represión; nuestro plan de lucha debe apuntar a levantar paros escalonados en el sector educativo rumbo al paro nacional, donde el magisterio de la CNTE y los sindicatos que se reclaman combativos y democráticos -como la Nueva Central de Trabajadores- deben encabezar la lucha por echar abajo las reformas estructurales, contra la represión y por la desmilitarización inmediata del país, exigiendo la aparición con vida de los normalistas, el cese a las desapariciones forzadas y la libertad incondicional de todos los presos políticos del país.