MTS - Movimiento de los Trabajadores Socialistas

Al inicio de este ciclo escolar, el gobierno federal intensificó su ofensiva contra los trabajadores de la educación y contra la educación pública. La Alianza por la Calidad de la Educación (ACE), firmada entre Calderón y Elba Esther Gordillo, ha dejado indefensos a más de un millón de trabajadores que conformamos el SNTE.
La ACE ha tenido como consecuencia la modificación de las condiciones laborales de los trabajadores de la educación y del sistema educativo, pues está encaminada a reformar los artículos 3° y 31° constitucionales para desmantelar la educación pública y permite la flexibilización laboral en nuestro sector. Prueba de ello son las claves de adscripción para varios tipos de interinatos (20, 25, 23, 97), que anulan las prestaciones por antigüedad; los cambios de actividad impuestos por los directivos; la congelación de plazas; etc.
En el D.F. quieren desaparecer el turno vespertino de 34 secundarias: no registrando alumnos para primer año; canalizando a los alumnos de 2° y 3° al turno matutino o a otras escuelas; compactando o saturando los grupos matutinos. En esta ciudad existen 600 edificios de secundaria con dos o tres turnos–donde hay Escuelas para Trabajadores-, que cuentan con una plantilla de alrededor de 60 trabajadores cada una. De darse la eliminación de los turnos vespertinos y para trabajadores, alrededor de 18 mil trabajadores de la educación serían removidos y desplazados de sus labores. La sección 9ª de la CNTE-SNTE también sufrió este ataque: le cerraron 600 turnos vespertinos en primarias e impusieron el horario ampliado, precarizando sus derechos laborales.
El gobierno nos quiere implementar su política de despidos masivos, como sucedió hace un año con los 44 mil trabajadores del SME. Solo que en el caso del magisterio, es favorecida por el pacto entre el gobierno y los charros del SNTE encabezados por Elba Esther Gordillo, quienes jamás han representado los intereses de la base trabajadora.
Solo hay que recordar que el ascenso de Gordillo a la dirección del SNTE, fue resultado de un pacto entre burocracias a cambio de canonjías y de la subordinación de nuestro sindicato a los intereses, primero del PRI y ahora del PAN en el gobierno. Por ello es imprescindible que saquemos a Elba Esther Gordillo y su camarilla de gánsteres de nuestro sindicato. Los trabajadores debemos recuperarlo, para ponerlo al servicio de defender nuestras conquistas laborales y la educación pública.

La Asamblea Unitaria de los Trabajadores de la Educación y la necesidad de la unidad de los trabajadores

Pero los trabajadores de secundarias no hemos permitido que pase la ACE a nombre de mejorar la calidad de la educación y nos hemos aglutinado en la Asamblea Unitaria de los Trabajadores de la Educación (AUTE). En ésta confluyen representantes de más de 70 escuelas afectadas, y hemos discutimos el camino a seguir para no permitir la flexibilización laboral y la eliminación de la educación pública, viendo la necesidad de unificarnos como trabajadores de base organizados en asambleas.
La AUTE logró arrancar a las autoridades de la Administración Federal de Servicios Educativos del Distrito Federal (AFSEDF) y a la Coordinación Sectorial de Escuelas Secundarias (CSES), con la movilización, una Mesa de Trabajo con carácter resolutivo. En ésta se ganó la apertura de grupos de primer año en algunas escuelas secundarias que querían cerrar; el acuerdo de no cerrar los turnos vespertinos en las 34 escuelas, 7 de estas participaran en la preinscripción de febrero. Sin embargo, este esfuerzo es sólo un primer paso, pues aunque se logró revertir algunas imposiciones, las autoridades de la SEP se empeñan en imponer la ACE. Es por esto que hace falta que el conjunto de los trabajadores de la educación en todo el país nos organicemos y movilicemos unitariamente.
Los trabajadores de la educación debemos reflexionar y cuestionar por qué, en el D.F. y Área Metropolitana, nos dividieron en cuatro secciones (9, 10, 11 y 36) Somos la única entidad de la republica que está dividida de esta manera y así nos quieren mantener: divididos y controlados. Somos una fuerza muy importante que puede paralizar el centro neurálgico del país. Es por eso que la lucha por la unidad de los que conformamos el SNTE, tiene gran importancia para detener este ataque contra los trabajadores y por el derecho a la educación pública y gratuita.
Para llevar adelante la defensa de nuestros derechos laborales y de la educación, nuestra primera tarea, como trabajadores, es democratizar nuestro sindicato, impulsando asambleas por escuela y por zona; mismas que garanticen y vigilen la rotatividad de nuestros representantes y el cumplimiento de los acuerdos emanados de nuestros órganos de decisión. En este sentido es de mucha importancia retomar y recuperar la lucha que dio un sector importante de trabajadores de la educación en 70’s y 80’s, que conformaron la Coordinadora Nacional de los Trabajadores de la Educación (CNTE), en pro de la recuperación y democratización de nuestro sindicato.
No debemos olvidar que en esta lucha nuestros mejores aliados son los mineros, los electricistas, los pueblos originarios y el pueblo oprimido. Y es con estos sectores que tenemos que convocar un gran Encuentro Nacional de organizaciones y trabajadores, que discuta un plan de acción conjunto para echar abajo las políticas anti obreras, anti populares y militaristas, del gobierno y sus aliados. ¡Fuera Elba Esther Gordillo, sus gánsteres y sicarios del SNTE! ¡Democraticemos nuestro sindicato para defender nuestros derechos laborales y sociales! ¡Abajo la ACE! ¡Asamblea Única de todo el magisterio del D.F y los estados que quieran luchar contra los planes del gobierno! ¡Unidos y organizados venceremos!