MTS - Movimiento de los Trabajadores Socialistas

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ALEMANIA
Por: Janos Bergmann, RIO Berlin

Más de 120 personas se dieron cita en la Casa del IG Metall (Sindicato de Metalúrgicos) para escuchar y discutir con Raúl Godoy en el marco de su gira por Europa y de su última parada, Berlín. Después de una gira intensa que incluyó actividades en Francia, el Estado español, Grecia y finalmente la capital del Coloso Europeo. A pesar del contraste de llegar de Grecia -y de palpar la dramática situación que ahí se vive producto de la crisis capitalista-, a la ciudad desde donde se vienen imponiendo las medidas de austeridad -que buscan descargar los costos de crisis en las espaldas de los trabajadores-, la experiencia de Zanon a través de uno de sus líderes históricos se hizo escuchar. Con una sala llena del quinto piso de la imponente Casa del IG Metall, sede del más grande y poderoso sindicato alemán, la cual se ubica en el antiguo barrio obrero de Kreuzberg, el obrero ceramista habló por más de una hora ante un público muy atento. Además de contar momentos importantes de la lucha de Zanon -a ya más de diez años de iniciada la lucha y de conquistar el control obrero de la producción-, contó todo el trabajo previo de preparación, en momentos donde no era posible ni siquiera discutir abiertamente de los problemas en la fábrica sin ser despedido y explicó por qué frente a la crisis son los trabajadores quienes pueden dar una verdadera respuesta, en beneficio de sus propios intereses y el de los sectores oprimidos. Al referirse a su viaje por Europa, contó la experiencia que tuvo con los trabajadores de Vio.Me, una fábrica bajo control obrero en Tesalónica, Grecia, de la que planteó la urgente necesidad política y material de solidarizarse con esta lucha que es y puede ser una importante perspectiva para la clase obrera griega, europea y de todo el mundo. En respuesta a esto se logró una colecta de más de 250 Euros por parte de los asistentes. De esa manera, la charla, organizada con mucho entusiasmo por el grupo RIO en frente único con varias organizaciones de la izquierda trotskista y sindical, pudo transmitir vivamente –ante el profundo pesimismo frente a la crisis que atraviesa la izquierda europea– que Zanon no cayó del cielo, sino que fue producto de un intenso trabajo preparatorio por parte de organizaciones revolucionarias como el PTS en contra del sentido común, y un programa de reivindicaciones transitorias ligando la lucha contra el cierre de la fábrica con una respuesta obrera ante la crisis de toda la sociedad. En ese marco, Zanon es un ejemplo a seguir en Europa también, como forma de resistencia – como viene siendo la fábrica Vio.Me – desde la cual es necesario avanzar en el camino de la revolución socialista.