Toda la solidaridad con los trabajadores de Jonhson & Controls, en Reynosa Tamaulipas
27 Sep 2014
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Tribuna Socialista (TS) entrevistó a Emmanuel Gómez Esteban (EGE), representante legal de los trabajadores en lucha de esta autopartista transnacional en el norte del país.
TS: ¿Puedes contarnos acerca de la lucha de los trabajadores?
EGE: El conflicto comienza porque J&C vendió la planta a Visteon, cediendo el contrato de los trabajadores sin su consentimiento. Cuando los obreros se enteraron, cuestionaron acerca de sus derechos como la antigüedad y prestaciones. Los representantes sindicales de la CTM nunca quisieron demostrar que, como ellos aseguraban, todos sus derechos se habían respetado. Por esta razón los trabajadores desconocieron al sindicato, y por decisión de asamblea organizaron estallar una huelga el 13 de julio, la cual duró 11 días.
TS: ¿Cuál fue la respuesta del gobierno de Tamaulipas?
EGE: El gobierno trató de mediar en el conflicto. Después de que el sindicato no pudo comprar a los trabajadores que dirigieron la lucha, el secretario, subsecretario y el presidente de la Junta de Conciliación (JCA) se presentaron a negociar. Pero la empresa no tenía disposición de ceder, y al cuarto día llegó la policía y liberó los accesos a la planta para que las otras naves pudieran operar. Todos los trabajadores que participaron en la huelga fueron despedidos, actualmente hay casi 260 en lucha. El gobierno ha ofrecido apoyar con despensas y becas, pero no devolviendo el puesto de trabajo.
TS: ¿En qué momento está la lucha ahora?
EGE: La huelga fue declarada inválida por la JCA, pero el paro siguió hasta el día 11, cuando se decidió por asamblea levantarla, debido al desgaste y el agotamiento de los recursos económicos. Se decidió seguir la lucha por la vía legal. En septiembre tendremos las primeras audiencias.
TS: ¿De qué manera se puede apoyar la lucha de los trabajadores de J&C?
EGE: Estamos pidiendo el apoyo de otros sindicatos y organizaciones para difundir la lucha y aportar al fondo de huelga. Parece que los dirigentes están boletinados y no pueden conseguir trabajo. La lucha legal recién comenzará. Sabemos que aunque estamos muy lejos, la solidaridad no tiene fronteras. {{}}
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