MTS - Movimiento de los Trabajadores Socialistas

El nuevo periodo escolar en el Instituto Politécnico Nacional (IPN) comenzó con mucha actividad, desde los primeros días asambleas multitudinarias, debates y reuniones buscan mantener el movimiento estudiantil en el IPN y generar todas las condiciones necesarias para llevar a cabo el Congreso Nacional Politécnico (CNP), que busca refundar esta institución con bases democráticas donde la comunidad estudiantil tenga voz en las decisiones que le afectan.

No obstante, recientemente alumnos de esta casa de estudios han señalado que las autoridades no han asistido a las reuniones preparatorias de dicho congreso, lo cual fue uno de los acuerdos a los que se llegó luego de casi tres meses de paro con el gobierno federal.

Según dichos acuerdos, 80 días hábiles después de iniciadas las clases se deberá instalar la Comisión Organizadora del Congreso Nacional Politécnico (COCNP), sin embargo las autoridades no se han integrado a los trabajos preparatorios. Para preparar un congreso de esta magnitud las tareas son muchas y el tiempo pasa rápidamente, por lo cual cada día es muy importante.

El nuevo director impuesto por el gobierno, Enrique Fernández Fassnacht, ha argumentado que tiene “mucha carga de trabajo” y ni él ni ningún representante de la dirección se han involucrado con las tareas. Sin embargo, fueron las propias autoridades gubernamentales quienes insistieron en que el nuevo director debía tomar parte en el CNP y en su preparación.

Mientras tanto los estudiantes politécnicos continúan la organización planteando que a más tardar en un mes debe estar instalada la COCNP, por lo cual han discutido ya los perfiles de los alumnos, profesores y trabajadores que deberán tomar parte en el congreso.

Es claro que un congreso que refunde una institución tan grande e importante como el IPN es un tema que le preocupa al gobierno, pues esto puede contraponerse a sus planes de privatización de la educación y generar politización y organización en las universidades públicas.

Por tanto no es descartable que el hecho de que las autoridades no se sumen a las tareas preparatorias puede indicar un intento de hacer menos este proyecto de refundación de la institución en el cual la discusión asamblearia y democrática sea una piedra en el zapato para el gobierno.