Niños migrantes presos del imperialismo yanqui

29 Jun 2014 | Huyen de la pobreza, de la violencia del narco, los paramilitares y las fuerzas represivas del Estado. Son niñas, niños y jóvenes centroamericanos y mexicanos, que sortean innumerables peligros para llegar a la “tierra prometida” del marchito sueño americano. Están expuestos a la trata de personas, el abuso sexual y a los cárteles del narco. Son detenidos en la frontera, por no tener papeles para una estancia legal en el vecino del norte. Son hacinados en bases militares estadounidenses, en condiciones terribles: con poco espacio, durmiendo en el frío concreto de centros de detención del Departamento de Seguridad de EE.UU., en lugares insalubres, sin atención médica. Muchos son maltratados, abusados, humillados. La prensa burguesa habla con cinismo de “crisis humanitaria”. Les respondemos: es el capitalismo.   |   comentários

Huyen de la pobreza, de la violencia del narco, los paramilitares y las fuerzas represivas del Estado. Son niñas, niños y jóvenes centroamericanos y mexicanos, que sortean innumerables peligros para llegar a la “tierra prometida” del marchito sueño americano. Están expuestos a la trata de personas, el abuso sexual y a los cárteles del narco. Son detenidos en la frontera, por no tener papeles para una estancia legal en el vecino del norte. Son (...)

Según un reporte publicado en La Jornada, desde el 1° de octubre del 2013 hasta el 15 de junio de este año, 52 mil menores de edad no acompañados por adultos han sido detenidos en la frontera sur, una cifra sin precedente: provienen de Honduras, de México, de Guatemala, y de El Salvador.

En lo que va del año fiscal 2014 (que inició el 1° de octubre de 2013), esto representa un incremento de 92% comparado con el total de todo el año fiscal 2013. Algunas mujeres con hijos pequeños son “beneficiadas” con un pasaje de autobús para buscar a su familia y una pulsera electrónica para rastrearlas, pero deben presentarse en la corte a los 30 días.

Para colmo, la Suprema Corte emitió un fallo que determina que hijos de inmigrantes que cumplen 21 años de edad mientras sus familias esperan sus papeles de residencia legal pierden su lugar en la larga fila de espera y no les será otorgada prioridad, lo cual podría implicar más separación de familias.

Mientras tanto, demócratas y republicanos continúan condenando a la pobreza y la violencia que crearon sus organismos financieros internacionales. Obama ha superado los 2 millones de deportados desde que es presidente, cifra que supera las deportaciones realizadas por sus antecesores. Una promesa incumplida más: revisar la cuestión de las deportaciones, cuestión que postergó hasta el verano con el argumento de dar chance a que se resuelva la restrictiva reforma migratoria que está en discusión desde el año pasado. Los activistas defensores de los migrantes denunciaron que esto implicará que continúen más de mil deportaciones por día.

Mientras tanto, se suceden los mítines, marchas, peticiones y acciones directas de las agrupaciones de migrantes y sus partidarios.
El gobierno de Obama (y también el partido republicano) se distancian cada vez más del pueblo estadounidense, ya que 62% de la población apoya una vía a la estancia legal para los más de 11.5 millones de personas indocumentadas que residen en ese país.

La frontera: armada hasta los dientes

Una arista más de la crisis de hegemonía estadounidense: menor despliegue de tropas en el mundo, mayor militarización de la frontera. Señala Todd Miller, periodista especializado en el tema “Los radares de Northrop Grumman montados en aeronaves ha facilitado la detención de 1,874 inmigrantes. El zumbido de los drones en el desierto de Sonora se parece cada vez más al de los drones en el desierto de Dashti Margo”.

En la entrevista con truthout.org, Miller señala que el presupuesto de la agencia de seguridad de inmigración sobrepasa el de cualquier otra institución de vigilancia. El presupuesto de Vigilancia de Inmigración y Fronteras -18 mil millones de dólares en 2012- fue más alto que el todas las demás agencias de vigilancia combinadas, incluyendo la DEA y el FBI. Las grandes empresas del aparato militar como Boeing, Raytheon y Lockheed Martin están enfocándose en el mercado de la patrulla de fronteras, cuyo presupuesto estimado para 2018 será de 544 mil millones de dólares (1).

Obama: más cárceles y repatriación

El presidente estadounidense está mostrando su rostro más reaccionario. En el Día Internacional del Refugiado anunció la construcción de más centros de detención para detener la marea de migrantes y destinar más jueces a la frontera sur, para acelerar los procesos de deportaciones. Se anunciaron también el envío de 9.6 millones de dólares a los gobiernos de Guatemala, El Salvador y Honduras, para “apoyar” la repatriación de los migrantes indocumentados. Es decir, por un lado, se redoblarán las cadenas de la deuda externa de esos países, y por el otro, se obligará a regresar a la miseria y la violencia a los millones de migrantes que dejaron sus países de origen.

Por una salida obrera a la migración

El viernes 20 de junio se reunieron Obama con Osorio Chong, secretario de gobernación y los presidentes centroamericanos de El Salvador, Honduras y Guatemala. Salvo el representante de Honduras, que pidió un flujo migratorio libre, los demás gobiernos pretenden deportar a los migrantes de EE.UU.

Es hora de terminar con esta situación aberrante. Los migrantes en lucha deben estrechar lazos con sus hermanos de clase estadounidenses, blancos, afroamericanos e indígenas. Todos juntos deben enfrentar a los partidos demócrata y republicano, quienes representan los intereses del 1% de los parásitos multimillonarios que viven del trabajo ajeno. Los trabajadores de Latinoamérica deben movilizarse de apoyo a sus hermanos migrantes.

¡Por la desmilitarización de la frontera! ¡Alto a las deportaciones! ¡Por el libre tránsito entre los países! ¡Plenos derechos sociales, laborales, políticos y sindicales a los migrantes! ¡Salud y educación gratuitas para niños y jóvenes migrantes! ¡Salarios que cubran el costo de la canasta básica para todas y todos los trabajadores que laboran en EE.UU., sean nativos o migrantes! ¡La clase obrera es una y sin fronteras!

(1) Citado en Silvia Arana: “Detención masiva de niños en la frontera sur de EE.UU”, www.rebelion.org.









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