Nuevo 8 de marzo combativo

¡Todas somos Yakiri!

24 Mar 2014 | En esa tarde de sol radiante, la sonrisa y fuerza de Yakiri encabezaron la movilización en el marco del Día Internacional de la Mujer. Junto a ella estuvieron sus padres y Norma Andrade, destacada luchadora contra el feminicidio, y decenas de feministas, trabajadoras y compañeros solidarios. Entre ellos, una delegación que acompañaba a Selene, trabajadora metalúrgica despedida por estar embarazada.   |   comentários

En esa tarde de sol radiante, la sonrisa y fuerza de Yakiri encabezaron la movilización en el marco del Día Internacional de la Mujer. Junto a ella estuvieron sus padres y Norma Andrade, destacada luchadora contra el feminicidio, y decenas de feministas, trabajadoras y compañeros solidarios. Entre ellos, una delegación que acompañaba a Selene, trabajadora metalúrgica despedida por estar (...)

Este 8 de marzo, Pan y Rosas junto al MTS, participó con una gran columna de más de 200 compañerxs, encabezada por mujeres trabajadoras y estudiantes que denunciaban en sus pancartas el ataque al conjunto de lxs trabajadorxs producto de las reformas estructurales, el trabajo precario, los salarios de miseria, la carestía de la vida, el feminicidio, las redes de trata. Marchamos gritando: ¡Queremos vivas a todas las mujeres, justicia para Yaki no creemos en sus leyes! ¡Ahora, ahora, se hace indispensable justicia para Yaki, y castigo a los culpables!

Se celebró la conmemoración de los más de 100 años de este día propuesto por las feministas socialistas, como un día de organización y lucha por los derechos de las mujeres con el objetivo de acabar con este sistema capitalista y patriarcal. Volvimos a salir a las calles porque las condiciones de la mayoría de las mujeres no sólo no han mejorado, sino que se han recrudecido.

La movilización se da luego de 86 días de lucha y movilización, tras los que le arrancamos a esta justicia misógina a la compañera Yakiri Rubio. La libertad de Yaki es conquista de todas y no una bondadosa concesión de las autoridades; es producto de la organización de decenas de mujeres que decidimos ir a las calles y luchar por su liberación.

La fuerza de Yaki debe ser el motor para seguir luchando no sólo por nuestro derecho a una vida libre de violencia y por el derecho al aborto libre y gratuito, debe ser una lucha encaminada al cuestionamiento de este gobierno y este sistema misógino y machista, que legitima la violencia y opresión para el conjunto de las mujeres.
Desde Pan y Rosas nos sumamos a la campaña por la libertad de Yakiri Rubio mediante foros para exponer el caso en viva voz de la madre y el padre de Yakiri, además de la organización desde abajo por su liberación.

Se abrieron espacios en la UAM Azcapotzalco y Xochimilco, así como en la UNAM en la FES Aragón y Acatlán, y finalmente en la Facultad de Derecho, reuniendo en total a más de 400 personas en su mayoría mujeres trabajadoras, maestras y estudiantes.

En dichos escenarios se expresó el repudio y la indignación con el motivo por el cual estaba presa Yaki, así como el claro tinte misógino del caso.
A un año de gobierno del feminicida Peña Nieto, seguimos en pie de lucha y vamos a seguir movilizándonos contra las reformas estructurales que empeoran aún más nuestras condiciones de vida; por el derecho a decidir sobre nuestros cuerpos sin la intromisión de la Iglesia y el Estado; contra los trabajos precarios y la discriminación sexista en el trabajo; y por poner fin al cruel fenómeno del feminicidio y las redes de trata, que nos han costado la vida de miles de mujeres y niñas asesinadas, y que cada año nos sigue arrebatando a otras miles para seguir aumentando las ganancias económicas que generan la explotación y el comercio sexual.

Desde Pan y Rosas en el Movimiento de los Trabajadores Socialistas, impulsamos la organización, movilización y la lucha de las mujeres con la perspectiva de la revolución socialista, para acabar de una vez con este sistema de explotación y miseria.

Luchamos no sólo por la igualdad ante los hombres y contra cualquier tipo de violencia hacia las mujeres, peleamos por sentar las bases para la completa emancipación de las mujeres en una nueva sociedad en donde no existan más explotación ni opresión alguna.

Queremos reconstruir un movimiento de mujeres combativo que teja alianzas con sus compañeros de clase, y que retome las banderas del marxismo revolucionario, así como las lecciones de nuestras compañeras Clara Zetkin, Alexandra Kollontai y de la más heroica dirigente del proletariado internacional, la revolucionaria Rosa Luxemburgo.

¡PORQUE NO PEDIMOS, EXIGIMOS… NUESTRO DERECHO AL PAN Y TAMBIÉN A LAS ROSAS!









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